La llegada de Google Analytics 4 y la desaparición de Universal Analytics trajo consigo muchos cambios a la hora de configurar e implementar un tracking. Entre ellos cabe destacar una de las funcionalidades que muchos, entre los que nos incluimos en aditu, más echamos de menos: el filtrado de tráfico a través de la IP.
Lo que tenemos ahora: filtros de datos
Sí que es verdad que aunque el nombre “Filtros de datos” parezca prometedor y nos lleve a pensar que vamos a poder restringir el tráfico interno o de desarrollo de una forma relativamente sencilla, todos los que hemos trabajado con ellos sabemos que nunca es tan fácil.
En este caso el problema está en que lo que Google no te dice claramente es que, para que funcione, eres tú el que tiene que definir qué quieres considerar tráfico interno y tampoco te dice cómo hacerlo.
Así que para eso estamos el equipo de aditu.
Cómo definir qué tráfico interno
La opción para establecer las IPs que queremos considerar tráfico interno está un poco escondida, concretamente tendréis que seguir este camino: Administrar > Recogida y modificación de datos > Flujos de datos.
Una vez ahí, tendréis que seleccionar el flujo de datos correspondiente.
Dentro de ese panel, id hasta casi abajo del todo y buscad la opción de “Configurar ajustes de etiquetas”.
En la siguiente pantalla, tenéis que localizar la funcionalidad de “Definir tráfico interno”. Seguramente no os aparezca en un primer vistazo, así que tendréis que hacer bastante scroll o incluso clicar en “Mostrar más”.
Y ahora sí que sí, en este panel podréis crear un filtro de IPs de verdad, donde tendréis que definir un nombre, el tipo de tráfico que es y, lógicamente, las IPs o grupos de IPs que queréis excluir.
De esta manera, el filtro de tráfico interno que veíamos en un principio empezará a tener un sentido y a filtrar de verdad el tráfico que venga de esas IPs.
En resumen, aunque Google Analytics 4 ha complicado el filtrado de tráfico interno respecto a Universal Analytics, configurar correctamente las IPs permite recuperar ese control esencial sobre los datos. Dedicar unos minutos a definir estos ajustes garantiza una medición más limpia, fiable y útil para la toma de decisiones.
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